Amig@s...
al olmo viejo de nuestra amistad...hojas verdes le han brotado....
Este Blog, lugar de encuentro, sin mas pretensiones que acoger pequeños retazos de nuestra convivencia: pensamientos, celebraciones, viajes, añoranzas...y todo aquello que nosotros consideremos válido para fortalecer una amistad que ya dura alrededor de seis años.
Todo comenzó en la Nau Gran, matriculándonos en el Itinerario de C. Sociales, Económicas y Jurídicas... ¡ que acierto, amig@s !.
Al viejo olmo de la Universidad de Valencia le brotó una rama increíblemente solida, brillante y pujante, que con el paso de estos seis años se ha visto fortalecida con la aportación de cada uno de nosotros y de manera destacada por la de esas personas especiales que han regado, cuidado y mimado el grupo impidiendo que la rama se seque...no hace falta dar nombres, todos sabemos de quienes se trata.
No es facil encontrar un grupo así.
Comprometido, colaborador, alegre, comprensivo, vital...muy vital, y poseedor de tantos calificativos mas que son su esencia...el porque de su continuidad.
Tres primeros años disfrutando de las clases en común...con tantas y tantas anécdotas que recordarlas nos hace vibrar el corazón.
Amigos como emblema pero tan distintos unos de otros como distinta es cada rama del olmo.
Desde aquellas increíbles paellas en casa de Amparo, los vinos en los Pubs cercanos a la Universidad, cenas y comidas de Navidad en lugares distintos...como la Picaeta, El Mesón, y alguno ya desaparecido como Casa Polit; meriendas imposibles de olvidar en casa de Maria Aledo, anfitriona ejemplar, y la última en casa de Amparo y Juanjo...un alarde de generosidad.
Y aquí me detengo, Amparo y Juanjo..., la tenacidad ejemplar de Juanjo, pocas veces encontrada a lo largo de nuestra vida... un hombre donde los haya...con dos (permitirme la expresión) "cojones" que nunca perdió su sonrisa, su entrega, su interés por vivir y su afecto al grupo, compartido por todos con él y con Amparo, puntal inestimable con una voluntad de acero.
Y "el Camino I" ( ahora en ciernes II), "tela" el trabajo de Samuel Martins, meticuloso, serio, entregado (no podemos ni adivinar las horas que está empleando para que todo cuadre a la perfección), una ingeniería nanométrica...
Desde aquí un recuerdo especial, que me hace aflorar las emociones, a Antonio, siempre integrado, con su sonrisa cargada de ironía que un día partió a preparar un próximo lugar de encuentro para el grupo. La única rama que del olmo se secó, para tristeza de todos nosotros (no puedo evitar que las lagrimas me hagan interrumpir la escritura).
De esta rama Central, una rama potente nació, hace aproximadamente tres años, entre los brindis de una cena de Navidad, cuando sugerí, (la tenía largo tiempo cociendo en mi cabeza), la creación de una Asociación de alumnos y ex-alumnos de la Nau Gran, y que fue aceptada con entusiasmo por el grupo. Lamenté enormemente tener que separarme, tras los primeros pasos y reuniones con los Rectores de la Universidad, por mi traslado de residencia a Oropesa, pero tras dedicación y lucha por un grupo de "aventureros" hoy es una realidad incuestionable y crece a pasos acelerados, magníficamente presidida por Prometeo, amigo y compañero donde los haya, ágil, con iniciativas, ponderado...al que se le debe apoyar sin regatear esfuerzos, en todo lo mucho que significa su expansión.
Después de tres años y fracasado el proyecto de un nuevo Itinerario de Jurídicas, no culminado, vino el Big Bang...¡cada uno tomo un camino!.
La Universidad Politécnica, Itienerarios de Historia, Geografía, etc., mi "exilio" a Oropesa tras mi divorcio, etc., dispersaron el grupo.
Pero tan solo a nivel de "estudios".
Siempre recordaré aquellas divertidísimas visitas a Oropesa, mi exilio, por parte de "los de siempre", anecdóticas (recuerdas María...?) capitaneados por José Vicente (menudo tipo éste, al que nunca valoraremos suficientemente en su papel de mantenedor e integrador del grupo).
Los "de siempre" permanecimos unidos y la Amstelería, con Rubén, ha sido y sigue siéndolo, nuestro Centro de reunión y tertulia.
Es el "cráneo" donde nuestro "cerebro" hace mover nuestros "organos", donde sigue viva la llama y entre partiditas de dominó y tertulia, seguimos oxigenando la entusiasta continuidad de nuestra "rama".
En el bosque de nuestra vida hay un símbolo que nunca podremos olvidar... este olmo viejo...y especialmente su vigorosa rama de nuestra amistad.
Haced que broten cada vez nuevas hojas verdes y si lo estimáis oportuno poner vuestro grano de arena colaborando en esta modesta ventana con vuestra participación en la manera que lo consideréis oportuno, y posibilitando la supervivencia a nosotros mismos de lo que ha sido, es y será esta mas que familia.
¡Larga vida a nuestro Olmo!.
Roberto Coffé
