Está lleno de Arquitectos del momento especial...de la sorpresa...de encontrarle siempre un nuevo ángulo a la foto...!.
Después de haber cerrado por este año los encuentros de las mañanas del sábado en el Parque del Turia, (el pasado día 4 realizamos una última jornada sendero/gastro/amistosa) como siempre con sus distintos grados de participación: unos mas sendero...., otros mas gastro...pero todos amistosa con un clima genial, y un río pletórico de agua descendente, que culminó con una invitación por parte de Paco, aceptada...¡¡¡faltaría mas!!! por unanimidad a recoger naranjas de "su campo".
Su gesto no se mereció las tensiones de ser copiloto de rally, e involuntariamente dejó sobre su asiento un ventrículo con su válvula correspondiente junto a unos centímetros de arterias coronarias...por Dios, que ingrata es la vida esta.
Las naranjas sabrosísimas , con un zumo que resucita a un muerto (si, ya lo sé, no se lo voy a ofrecer a ningún cadaver político...que sí..¡que a ése no!...
Gracias Vicente. Las huestes de Atila arrasaron tus campos ...(jejeje, lo digo por mi...!). De acuerdo, ya está bien de querer hacerme el "grasioset"...
El prólogo a este escrito viene a relación con el paseo a través de la "horta de Rusafa", una sucesión de campos muy bien cuidados, con sus vigilantes alquerías, sus sistemas de riego tan rancios como bellos, sus maizales, coles, lechugas, escarolas, etc. (organizadas en surcos milimétricos).
Palmeras datileras, higueras, cañizos al borde de las acequias, caminos que se entrecruzan formando un tejido de asfalto y tierra por el que recorrerlos y que circundan a Castellar, Horno de Alcedo, Oliveral...y llega a los pies de la Ciudad de las Artes. El espectáculo es único.
Contemplar esa arquitectura vanguardista, filtrada por estos paisajes bucólicos, hace chocar en tu sensibilidad dos placas tectónicas, antagónicas una de otra...el pasado y el futuro juegan ante tus ojos.
Amigo, si no has tenido ocasión de pasearte por estas imágenes...¡hazlo!...Es un ángulo que se ofrece a tu deleite con tan solo entrar al sendero que conduce a la Ermita del Fiscal, frente al Centro Comercial del Saler.
Ermita tranquila, con sus "poyetes" frente a ella, donde hoy, hicimos nuestra comida de bocata, en ese tono tan amistoso y desenfadado que siempre el grupo sabe darle... (por cierto...que ricos estuvieron los que me hizo para almuerzo y comida Carmen Quiles, ...¡con deciros que me resbalaba el aceitíto por la comisura de los labios.. , ¡está todo dicho!).
Se nombró a Carmen abastecedora oficial del Camino por su buen hacer respecto al suministro de bebida y sus detalles de pastel de boniato y otros, así como a Alberto Coorganizador de Caminos y Senderos junto al maestro Samuel por su acierto en la elección del que hoy tanto nos hizo disfrutar.
En estas fotos tenéis una muestra, aunque pobre, de lo que mas arriba describo.
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